Dramaturgo / Marco Antonio de la Parra  

 

 


Telemaco/Subeuropa

de Marco Antonio de la Parra

Escena 20

Ruido de perros. Un reflector de interrogatorio sobre Teo. El Detective está en mangas de camisa, dispuesto a interrogarlo.


Detective: ¿Tú eres Teo?
Teo: Sí.
Detective: ¿Seguro?
Teo: Seguro.
Detective: Mira tu foto.
Teo: Soy yo.
Detective: ¿No podrían confundirte con alguien muy parecido?
Teo: Soy yo.
Detective: ¿A qué jugabas cuando niño, Teo? ¿A las muñecas o al fútbol?
Teo: A ninguna de las dos cosas.
Detective: ¿Destripabas animales? ¿Palomas, pequeños gorriones, gatos?
Teo: Alguna vez disparé con un rifle de aire comprimido.
Detective: ¿Qué hacías con las víctimas?
Teo: Nunca di en el blanco.
Detective: ¿Rompiste un vidrio?
Teo: Con la mano. Me caí de la cama. Saltaba. Quería volar y tocar el techo. Me fui hacia un lado. Aún tengo cicatrices.
Detective: ¿Desde qué edad te masturbas?
Teo: Eso es asunto mío.
Detective: Era asunto tuyo. Ahora nada te pertenece. ¿Me entiendes? Ahora se te va la vida. En las palabras se te va la vida. Y queremos saberlo todo. Todo. ¿Me entiendes?
Teo: Desde que pude hacerlo. Desde antes de tener pelos en el pubis.
Detective: ¿En qué pensabas cuando lo hacías? ¿En mujeres, en niños, en hombres, en animales?
Teo:
 ¿Importa realmente?
Detective: ¿En qué pensabas cuándo lo hacías?
Teo: No le incumbe.
Detective: ¿Cuál era tu fantasía favorita?
Teo: No quiero decirlo.
Detective: ¿Cuál era tu fantasía favorita?
Teo: ¡Yo no maté a mi madre! ¡Yo no he matado a nadie! ¡Yo sólo quería vivir más tranquilo! ¡Usted no sabe cómo lo he pasado toda la vida!
Detective: ¡Contesta exclusivamente lo que te preguntan, imbécil! ¿Cuál era tu fantasía?
Teo: Ya no importa.
Detective: ¿Hombres? ¿Mujeres? ¿Hombres y mujeres?
Teo: Ya no importa.
Detective: ¿Qué les hiciste a las putas en Amsterdam?
Teo: Nada.
Detective: ¿Qué te pasó en Berlín?
Teo: Nada.
Detective: No mientas.
Teo: Nada, no hablaban español.No me entendía con ellas. Nada.
Detective: Eso ya lo veremos. ¿Cuándo mataste tu primera puta?
Teo: ¿Lo dice en serio? En Berlín, una dominicana. Pensé en matarla. No lo hice.
Detective: ¿Te acostaste con ella?
Teo: No la toqué. Le dije que se atara y se dejó atar. Y que fingiera que me tenía mucho miedo. Y lo hizo.
Detective: ¿Y tu fantasía favorita?
Teo: ¡Las tenía cuando pequeño!
Detective: ¿Cuando la tuviste por última vez?
Teo: Hace unos meses.
Detective: Todavía te masturbas.
Teo: Sí ¿y qué? ¿Usted no se masturba acaso?
Detective: Siempre. Por supuesto que lo hago. Es fácil, rápido, portátil, totalmente gratuito y sin riesgos. ¿Por qué no iba a hacerlo?
Teo: ¿Y en qué piensa?
Detective: Eso no es asunto tuyo.
Teo: No les hice nada a esas putas. No me gusta la palabra además. Yo las trataba de tú, pero eran como señoras. Como mi hermana. Como mi madre. Yo sentía cariño por ellas.
Detective: ¿Qué les hacías con este cuchillo?
Teo: Las mataba.
Detective: Dijiste que no las mataste.
Teo: En mi mente las mataba.
Detective: Ellas se asustaron mucho ¿Sabes? Les hiciste pasar un muy mal rato ¿Sabes? ¿Por qué lo hacías?
Teo: Para saber...
Detective: ¿Saber qué?
Teo: Saber, entender, entender algo...
Detective: ¿De qué?
Teo: No sé, todo...
Detective: Las hiciste sufrir ¿sabes? Pensaron que se les iba la vida.
Teo: Yo no quise...
Detective: ¡Mentira! ¡Tú querías eso! Te gustaba ese jueguito. Dime ¿Qué equipo de fútbol te gustaba de niño?
Teo: No me gustaba el fútbol.
Detective: ¿Dónde pasabas el verano?
Teo: En casa, a veces en la playa.
Detective: ¿Y tu padre? ¿Iba con ustedes?
Teo: Nunca. Nunca fue con nosotros.
Detective: Dime ¿Afuera es de día o de noche?
Teo: No sé.
Detective: ¿Es invierno o verano?
Teo: No sé.
Detective: ¿En qué ciudad estamos?
Teo: No sé.

Detective: ¿Cómo te llamas?
Teo: Teo.
Detective: ¿Por qué andas todo ensangrentado?
Teo: Es mi sangre. De mis manos, de mis rodillas. De tanto subirme a muros y trepar por cornisas. Tanto lanzarme de vagones en marcha.
Detective: ¿Qué hacías con los trozos?
Teo: ¿Cuáles trozos?
Detective: Las partías en pedazos. Con experiencia de cirujano y luego... ¿qué hacías con los trozos?
Teo: Los lanzaba a la línea del ferrocarril, a las acequias, a los ríos.
Detective: ¿Quién te enseñó a cortar esos cuerpos?
Teo: Nadie. Lo leí en el diario.
Detective: ¿Cómo?
Teo: Lo que hicieron con los cuerpos.
Detective: ¿Cuántos fueron, Teo?
Teo: Una sola, la dominicana. Después me volví.
Detective: Fueron siete. Siete. La dominicana dio el grito de alarma. Nada más. ¿Qué hacías en Berlín?
Teo: Mi padre estuvo en Berlín. Antes del muro. O creo que estuvo en Berlín. Sus amigos estuvieron en el lado Este. Muchos de sus amigos.
Detective: ¿Preguntaste por él?
Teo: Nadie sabía nada.
Detective: Tu padre no había estado nunca en Berlín.
Teo: Me llegó una carta de mi madre.
Detective: ¿Dónde te ubicó?
Teo: Por el Cónsul.
Detective: ¿Te afectó la carta?
Teo: Sí.
Detective: ¿Qué decía?
Teo: Que la estaba matando.
Detective: ¿Y era cierto?
Teo: Era cierto.
Detective: Y fuiste donde la dominicana.
Teo: Sí.
Detective: ¿Y la mataste?
Teo: Sí.
Detective: Que entren a la negra esa.

Hacen pasar a la Puta.

Detective: ¿Es él?
Puta: Sí.
Detective: ¿Qué te hizo?
Puta: Me hizo sufrir.
Detective: Dile lo que quieras, está muerto de miedo.
Puta: ¡Hijo de la gran siete! ¡Mal parido! ¡Que te den por el culo! ¡Maricón! ¡Hacer sufrir a una mujer honrada! ¡Que te pudras en la cárcel! ¡Carajo!
Detective: Basta ya.


Sacan a la Puta.


Detective: ¿Era ella?
Teo: Sí.
Detective: Una mujer feroz ¿No?
Teo: No. Es una buena mujer. Es una santa. Yo la traté mal. Yo la maldije. Yo debo recibir el castigo.
Detective: ¿Qué castigo? ¿De qué castigo me hablas? Tú no mataste a nadie. Eres incapaz de hacerle daño a una mosca. Eres un niño ¿Sabes? Un niño sin remedio. No sirves para nada. Deberían matarte por cobarde. Ni siquiera has cometido un buen crimen. Ni siquiera has podido planearlo. La ira te retuerce los intestinos. Ni siquiera has sabido vengar el nombre de tu padre. Ni siquiera has podido librarte de tu madre. Eres un títere de ella ¿sabías? Un títere. No te atreverías a tocar a una puta.
Teo: Yo las maté. A todas. ¡Las maté!
Detective: Llévenselo.

Lo sacan arrastrándolo mientras grita.

Teo: ¡Soy culpable! ¡Soy un asesino! ¡Soy peligroso! ¡Muy peligroso! ¡Soy un criminal!

Es arrojado a la calle. Ruido de tráfico. Desamparo total.


Escena 1 | Escena 2 | Escena 3 | Escena 4 | Escena 5 | Escena 6 | Escena 7 | Escena 8 | Escena 9 | Escena 10 | Escena 11 | Escena 12 | Escena 13 | Escena 14 | Escena 15 | Escena 16 | Escena 17 | Escena 18 | Escena 19 | Escena 21 | Escena 22 | Escena 23 | Escena 24 | Escena 25 | Versión de impresión

 

 


Desarrollado por Sisib, Universidad de Chile, 2006