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Dramaturgo / Marco Antonio de la Parra |
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Telemaco/Subeuropa
de Marco Antonio de la Parra
Hermana entra ansiosa, en bata, corriendo. Tal vez agite una linterna. Teo se esconde en la oscuridad.
Hermana: ¿Quién anda ahí? ¿Quién se mueve? Escucho tu respiración. ¿Quién eres? ¿Teo? ¿Eres tú, Teo? Reconocería tu aliento a kilómetros. ¡Eres tú, Teo!
Teo: Silencio, por favor.
Lo ilumina con la linterna.
Hermana: ¿Cuándo llegaste? ¿Hace cuánto tiempo que vagas por ahí? Apestas. Tienes que darte un baño, tienes que entrar.
Teo: No, por favor, no. No quiero que ella se despierte.
Hermana: No despertará. Ha tomado píldoras.
Teo: ¿Otra vez?
Hermana: Somníferos. Y ha bebido. Discutió con Agustín. Está muy mal.
Teo: ¿Y Agustín?
Hermana: Con ella. Duermen los dos. ¿Qué te pasa? Te he extrañado tanto. Está tan vacía la casa sin ti. ¿Con quién hablo? ¿Con quién puedo lavar mis rabias?
Teo: ¿Has recibido mis cartas?
Hermana: No, hermano mío. Ninguna.
Teo: Te he escrito. ¿Dónde se pierden nuestras palabras, hermana?
Hermana: No lo sé. Pobrecillo. ¿Has sufrido mucho? He pensado tanto en ti.
Lo abraza. Se separa al instante, asustada.
Hermana: ¿Qué tienes en tu mano? Un cuchillo. ¿Por qué este cuchillo?
Trata de soltarse. El no se lo permite.
Hermana: ¿Qué te ha pasado? Estás manchado de sangre. ¿Cómo has podido volar así?
Teo: He regresado en barco, a pie, he cruzado la selva, la montaña.
Hermana: ¿Lo encontraste?
Teo: Seguí sus huellas. Bebí en sus bares, me senté en sus sillas, dormí en sus camas.
Hermana: ¿Está vivo?
Se escucha ruido dentro de la casa. La voz de Agustín.
Voz: ¿Quién anda ahí?
Teo cubre la boca de su Hermana. Le apaga su linterna. Todo queda a oscuras.
Voz: ¿Quién anda ahí?
Agustín, el Amante, abre la puerta que da al patio de la casa. Su perfil se recorta. Mira en silencio. Teo sujeta a su hermana. Agustín cierra la puerta. Teo se libera y va hacia la puerta cuchillo en ristre.
Hermana: ¿Estaba vivo? ¿Nuestro padre estaba vivo?
Teo: No.
Teo abre la puerta y entra. Todo queda otra vez a oscuras.
Hermana: ¿Teo? ¿Teo? ¿Qué quieres hacer, Teo?
Teo: Ya te escribiré.
Hermana: ¿Teo?
Todo a oscuras.
Hermana: ¿Teo? ¿Por qué no vuelves, Teo?